Hublot nos tiene acostumbrados a crear relojes espectaculares, como es el caso de sus recientes MP-10 Tourbillon sin esfera, MP-13 y Big Bang MP-11 con 14 días de reserva de marcha.
Pero si estos modelos no pasan desapercibidos en la muñeca, la marca suiza ha decidido explorar nuevos horizontes con su Arsham Droplet. Un nombre misterioso que designa a la vez un reloj de bolsillo, un colgante y un reloj de mesa, una obra sorprendente creada en colaboración con el artista contemporáneo Daniel Arsham.
Un «futuro vestigio» imaginado por Daniel Arsham
La relojería no es el campo en el que esperábamos descubrir una nueva obra de Daniel Arsham. Este artista contemporáneo es más famoso por su estilo único y su capacidad para transformar los objetos cotidianos en «futuros vestigios». Sin embargo, él es quien unió fuerzas con Hublot para crear un reloj que «trasciende los límites de la relojería tradicional».
Inspirada en las formas orgánicas y fluidas de la naturaleza, la Arsham Droplet es mucho más que un simple reloj. Arsham se inspiró en su repertorio artístico para imaginar este reloj como una fusión del pasado, el presente y el futuro, ilustrando así la maleabilidad del tiempo y de los materiales.
Acostumbrado a combinar el arte, la arquitectura y la actuación en sus obras, el artista neoyorquino evoca a menudo una nostalgia por el futuro, con objetos modernos erosionados como si fueran artefactos arqueológicos. Este concepto se refleja perfectamente en el Arsham Droplet, donde cada componente del reloj cuenta una historia de transformación e innovación.
Un reloj, tres formas de «llevarlo»
Ya que este objeto es definitivamente inclasificable, el Arsham Droplet no podrá ser exhibido con orgullo en la muñeca. Hublot explora aquí un nuevo terreno reinventando el reloj de bolsillo tradicional. Realizado en titanio, caucho y cristal de zafiro, puede transformarse en colgante o en reloj de mesa, ofreciendo así tres formas únicas de usarlo.
Su forma distintiva de gota de agua y sus dimensiones de 73,2 mm de longitud, 52,6 mm de ancho y 22,5 mm de espesor garantizan un agarre ergonómico y agradable. Los fanáticos de la marca suiza reconocerán algunos códigos de diseño icónicos de Hublot, como los seis tornillos en forma de H.
El cuadrante semi-mate barnizado en Verde Arsham y las agujas a juego refuerzan la identidad visual de este reloj único. En su interior, esta pieza excepcional puede contar con el movimiento Meca-10 ya visto en muchos relojes Hublot, y que muestra una impresionante reserva de energía de 10 días.
Finalmente, el Arsham Droplet también viene equipado con dos cadenas de titanio con el sistema patentado One Click de Hublot, facilitando así su fijación y transformación en collar, reloj de bolsillo o pieza central escultórica sobre un soporte de mesa de titanio y vidrio mineral.
Lo habrás entendido, esta nueva creación de Hublot es todo menos un reloj. Joya de ingeniería, obra de arte relojera, este objeto no como los demás diseñado con Daniel Arsham está limitado a 99 ejemplares. El precio de esta pieza está a la altura de su complejidad y rareza, mostrado a 92 000 euros.
