Aprender a no tomar las cosas personalmente: 4 consejos para preservar tu autoestima

Sin duda, todos hemos tomado las palabras o comportamientos de nuestros interlocutores demasiado en serio, bajo la influencia emocional del momento. Pero convertirlo en un hábito puede afectar rápidamente nuestro bienestar mental y psicológico. Para contrarrestar esta tendencia dañina, aquí tienes cuatro consejos inspirados en los métodos de los terapeutas familiares y de pareja.

1. Tomar distancia sobre la situación

A menudo, tendemos a enfocarnos excesivamente en nuestros propios pensamientos y emociones, lo que dificulta tener en cuenta otros puntos de vista. Como dice Maria, una experimentada terapeuta familiar y matrimonial: «aléjate de la narrativa y examina solo los hechos, no la interpretación«. Al practicar esta objetividad, es más fácil entender mejor las intenciones reales de las otras personas involucradas en la situación y evitar creer que se trata de unaataque personal.

2. Cuestionar sus interpretaciones

A veces, nuestra mente se deja llevar por suposiciones o hipótesis sin cuestionarlas. Por lo tanto, es apropiado examinar estas ideas preconcebidas y preguntarse si son racionales o irracionales, como sugiere Maria. Así, podemos cuestionarnos sobre el punto de vista de la otra persona y tratar de entender por qué actuó de esa manera. Esto no solo permitirá entender mejor la situación, sino también ganar en sabiduría para no tomar las cosas de manera personal.

Ejemplo:

  • Su colega le critica durante una reunión : ¿es porque intenta sabotear su trabajo o porque quiere mejorar el proyecto conjunto?
  • Tu amigo no responde a tus mensajes : ¿es porque te está evitando o porque está atravesando un período difícil?

En cada caso, explora diferentes explicaciones posibles para no saltar a conclusiones precipitadas que pueden dañar innecesariamente nuestro ego.

3. Descentrar su atención

A veces tenemos una tendencia natural a pensar que todo gira en torno a nosotros. Si bien esto puede ser legítimo en ciertos contextos, es esencial darse cuenta de que no siempre somos el centro de las preocupaciones de otras personas. Probablemente existen múltiples causas que motivan sus acciones o palabras, algunas de las cuales no tienen nada que ver con nosotros.

©Mei-Ling Mirow – Unsplash

Para dejar de tomar las cosas personalmente, intenta encontrar otras razones que expliquen la situación sin ponerte en el centro de la narrativa.

4. Buscar soluciones constructivas

A veces nuestras propias equivocaciones son realmente la fuente de problemas encontrados con los demás. En este caso, es importante reconocer nuestros errores y actuar para resolver la situación. Pero no debemos encerrarnos en la culpabilidad, que puede paralizarnos en lugar de hacernos avanzar. Como dice Maria : « busquen formas de resolver la situación en lugar de quedarse atrapados en la vergüenza».

Un ejemplo:

  • Si te das cuenta de que has faltado de empatía hacia tu amigo que está atravesando un período difícil, propónle salir para hablar y escuchar sus dificultades.

En definitiva, aprender a no tomar las cosas de forma personal requiere un trabajo propio constante y benévolo. Siguiendo estos consejos, estarás mejor preparado para enfrentar situaciones difíciles sin lastimar tu propia autoestima, mientras sigues siendo comprensivo y atento con los demás.

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.Los campos obligatorios están marcados con *